Blogia
Escritos desde el páramo

Prueba de agudeza visual

 

 

 

Me encuentro en el diario La Razón con este artículo titulado "Defensa borra del Alcázar de Toledo las huellas del asedio republicano". Prescindamos de que, según el contenido del citado artículo, creo que hubiera sido mejor un titular del tipo "La instalación del Museo del Ejército supondrá la retirada de las colecciones del Asedio" porque hablar del borrado de las huellas del asedio nos conduce a otra época distinta a la actual. ¿Qué quiero decir? Veámoslo.

Comencemos con una imagen antigua, el Alcázar de Toledo a mediados del S XIX según la litografía de Doroteo Bachiller para hacernos una idea de cómo era el edificio histórico que entonces estaba en ruinas después de su incendio durante la guerra contra Francia. Reconstruido, nuevamente incendiado y nuevamente reconstruido, llegó a 1936 con el aspecto que vemos en esta fotografía.

Después de la batalla que tuvo lugar en el Alcázar durante el comienzo de la Guerra Civil, el edificio sufrió daños severos hasta el punto de que prácticamente quedó destruido como se aprecia en estas fotografías que muestran las huellas del asedio de las tropas republicanas.

Veamos una página del diario ABC de fecha 2 de octubre de 1952 que contiene la información de que el día antes se habían iniciado las obras de reconstrucción del Alcázar de Toledo. En el mismo diario, 2 de julio de 1972 encontramos al información de que esa restauración estaba a punto de concluir. Fueron estas obras las que dieron al Alcázar su apariencia actual.

Y ahora vamos con la prueba de agudeza visual, ¿dónde están es esta última fotografía las huellas del asedio republicano? Obviamente no están, han sido borradas por los trabajos de restauración del edificio. Si una restauración que comenzó en 1952 eliminó las huellas del asedio republicano ¿a quién podemos "acusar" de ese suceso? Sí, a él lo que no deja de resultar irónico.

 

 

 

0 comentarios